De regreso.

Esta noche, mientras allá era casi mediodía, César y Dominguez charlaron un rato con nosotros. Qué maravilla es la tecnología: a través del chat por el Skype pudimos escuchar su risa, sus opiniones acerca de la gente con la que convivieron; sobre el eclipse, y nos platicaron acerca de las relaciones que establecieron con instituciones tanto en Rusia como en ciudades de Europa.

Estaban en Tallin, bella ciudad que conserva la arquitectura medieval, capital y principal puerto marítimo de Estonia, también conocida por su antiguo nombre germánico Reval.

De ahí, de Tallin ellos volarían en unas horas más a Londres y luego de Londres a nuestro continente.

Es un privilegio haber podido estar en esta plática, haber conocido sus impresiones y ser la portadora también de la mala nueva acerca de la muerte de los escritores Alejandro Aura y Víctor Hugo Rascón Banda, quienes se han ido muy cerca de la fecha en que también murió Alexander Solyenitzin, de quien les tocó una parte de los homenajes en Rusia.