Monday, March 05, 2007

Primer correo del Ché
comentando que escuchaba el
Programa Bandas y Bandidos
tomado de acá:
LA BESTIA ES EL "CHANQUETE" QUE EN IDIOMA QUECHUA SIGNIFICA "PERRO ATRAPADO EN EL CUERPO DE UN CABALLO".
Hace un par de noches, Noelia estaba viendo su colección de llaveros que provienen de distintos países.
De repente apareció uno con la forma del estado y la leyenda Sonora. Otro más con forma de bota que decía sonorense 100% por 100%. Otro con un sahuaro y una leyenda alusiva y así varios más.
Se me pusieron brillosos los ojos y la Noelia (mi esposa sonorense de hueso colorado nacida hace treinta y algo de años en Juarez y Periférico Norte) me miró y me dijo: “no te me agüites cabrón…”La neta estaba emocionado. Esto ocurría en el Valle de Paucarpata, al pie de la cordillera del Tunari, en el departamento de Cochabamba Bolivia a donde llegué desde Hermosillo saliendo del Ignacio Pesqueira el 5 de mayo a las 9:10 de la mañana, después de haber vivido en pleno calorón por 28 años. Por eso lo de la emoción y la piel chinita.
No me fui de la ciudad a la que llegué 28 años antes con mi, en ese entonces, compañera Mónica Luna (a la sazón dueña años después del Luna Dance) llamados por el gobernador Ocaña para “hacer Radio Sonora”.
No. Las ciudades como las personas cambian. Crecen, se transforman, pierden personalidad y en muchos casos enferman irremediablemente.A nadie le gusta ver que alguien a quien uno quiere se va deteriorando hasta llegar a un estado agónico en el que es irreconocible. Yo no me fui de la ciudad a la que llegué hace 28 años. Gracias a la maquiavélica intervención de los “desconocidos de siempre” que ven a los pueblos, estados, ciudades, caseríos y rancherías como si fuesen empresas en potencia Hermosillo, la de la Yucatán adoquinada, la de las colonias cahuameras de fin de semana, la de los vecinos amigables y cariñosos de risa franca y sentido del humor agudo y chingón, se transformó en una gran maquila. En una proveedora de mano de obra barata para aquellos a quienes se les ofrezca.
Una City en la que una despiadada e ignorante clase media ascendente se mueve con soberbia e intolerancia hacia los demás demostrando que las políticas de apoyo al ser individual sobre el ser social han funcionado.Mientras tanto en las colonias (léase: choyal, alvaro obregon, ley 57, Emiliano Zapata, El Ranchito, por mencionar solo algunas de la periferia marginada), la miseria sigue haciendo de las suyas. Eso se llama olla de presión pero los iluminados, los que deciden unilateralmente cómo “debe ser la vida de los demás” no lo saben o no lo quieren saber porque prefieren seguir viviendo dentro de un termo."Hermosillo es mejor que antes…" eso no es cierto, a pesar de que lo diga una persona a la que le tengo mucha estima (fuimos compañeros en Radio Sonora durante los años que estuvimos hasta que llegó el siniestro Félix Valdés).
Hermosillo se está transformando en un híbrido despersonalizado en el que la gente se va aislando paulatinamente de los demás y en el que poco a poco el tiempo libre (que es cada vez menor) debe ser utilizado para ver de que manera se puede uno comprar carro o algo parecido, pero del año, aunque eso implique un vil entracalamiento. De últimas, nunca hubo en Hermosillo tantas casas de empeño. Los camaradas “poetas, pintores y músicos malditos” que rifaban cómodamente en una época no muy lejana, andan valiendo madre, como sombras por los plumas, las emilianas y los seven.
Fueron vetados por la nueva consigna cultural no declarada pero ejercida y sometida por las preclaras autoridades. Fueron vetados de un plumazo pero se le dió a cada uno de ellos una tarjeta de cortesía para obtener descuentos en el Costco, Walmart, Sam, Soriana y en el recién inaugurado Wolworth. (no se como la Serdán pudo existir tantos años sin esta tienda que vende chucherías taiwanesas).
Con Noelia iremos cada fin de año para allá. Ella tiene su familia y yo también, aunque es otro tipo de familia. La gente que quiero, los únicos que tengo: la Coyo, la Graciela, el Juvera, los que fueron mis alumnos, mi dos queridísimos compas: el Abigael en el panteón de las manitos (ya las sacaron) y el Jorge Ochoa, dos veces premio nacional de poesía desconocido por las preclaras autoridades, que a su manera no vale madre porque esta aislado en el corral de la casa de la calle Tepic tomando interminables cahuamas y pensando sintiendo y escribiendo poemas chingones.
A ese Hermosillo iremos cada año con la Noe. A abrazar gente, a prodigar besos y cariños a quienes queremos. A dejar de pensar , aunque sea por un rato, que Hermosillo se esta transformando en una ciudad que “enoja a la gente”Ahorita que te mencioné a Abigael leo algo “ad hoc” con este asunto:
“…Por eso, visceralmente,
puedo decir estas palabras sacratísimas
con su sabor antiguo, ejidal y purísimo,
- Adela, parece que te escucho-:
chicharra, bichicori, chora, calichi, péchita, mochomo,
cholla,cachora,churea, chilicote,
chapo, sopichi, cochupeta, bichi,
apupuchi, chiriquí, cuitlacochi,
Suterráneos imanes, dígitas soledades,
sombra casi luz sólida,
Oh desierto, oh inmensidad,oh espacio
de las girasoladas quemaduras,
Oh Tú, Poesía, profundísimo hueco,
carne viva,
ahora estás conmigo.
”Abigael Bohórquez . Desierto Mayor. Heredad. Ed. Colegio de Sonora e Instituto Sonorense de Cultura.
Quiero que disculpes esto que es dicho-escrito visceralmente. Nací en Buenos Aires hace 64 años. No tengo familia de sangre más que un hijo en el Perú. Amo a Sonora, amo a la gente de Sonora desde el intelectual del güero Ernesto Camou Healy hasta el Lencho de Suaqui de Babiacora. Decidores de cosas importantes cada quien a su manera pero cosas importantes.
Amo Hermosillo por eso me duele que por efectos de “mentes torcidas” desconectadas con la realidad amorosa que caracteriza a las personas se este haciendo lo que se hace. ¡son verdaderas chingaderas!
¿Por qué te digo esto?¿Por qué a ti?
Creo que es porque los últimos tiempos (EL Jorge Ochoa me dijo un día: “tienes que escuchar a este cabrón”) te he escuchado a diario y creo que haces una labor social que ni tu sabes que haces. Para mi fuiste un referente, un recordatorio del Hermosillo que gachamante va desapareciendo.Paqueterrías: (de risa, no de paquetes) Voy desde la casa (es en el campo) a recoger a la Noe a la chamba. Voy entre pinares en una zona rural de mucha agricultura artesanal. Las campesinas con sus típicos sombreritos bolivianos, están en la acequia a un costado del camino con sus botas de hule removiendo en el agua los mazacotes de zanahorias para quitarles la tierra y poder luego embolzarlos.Voy escuchando bandas y bandidos (el inefable Ochoa me grabó mas de diez programas) es muy curioso escucharte en ese medio, en ese panorama humano tan, pero tan distinto a todos los niveles de lo que es el norte total. El cambio cultural es extremo entre el desierto del norte y los valles interandinos. No te darías una idea de lo distinto que es.El caso es que te recomiendo cambies el cintillo de: “un señor murió calcinado por los rumbos del boulevard Morelos”. Pueden llegar a creer que solo eso ocurrió y nada más. Por lo tanto Hermosillo sería realmente una ciudad segura.Lo más grave de toda esta chingadera es que si me fallan los vidrios de la Nissan Terrano me saldría muy caro ir con el Wicho.Te mando un abrazo. Ojala algún día puedas darte la vuelta por acá. De verdad tienes tu casa. Se que con tu sensibilidad aprovecharías mucho la experiencia. Es otro mundo, además cerquísima está Chile, Peru (Cuzco y Macchu Picchu), Brasil y Argentina.Me gustaría que me confirmaras que este mail pa’bajo te llego.Una vez mas Beto un abrazote, cuídate, aunque no la conozco saluda a tu familia desde Bolivia.
Ojalá algún día recales por este sur “que también existe”
RICARDO “CHE” RIBEIRO
gracias por los saludos y los hermosos recuerdos en tu programa el mas chingon del noroeste.
te mando un abrazote. cuidate.

2 comments:

Anonymous said...

Noelia???,se me hace que la mayor parte de las Noelias tenemos 30 y algo, no crees?

Pina said...

Sí, por la canción de Nino Bravo.
Saludos, Ingeniera Noelia.